NUEVA YORK (Del NY Post). Los Marineros estaban en una encrucijada al entrar en la temporada baja. ¿Descansar en Robinson Canó, Nelson Cruz, Félix Hernández y Kyle Seager o cambiarlos para rejuvenecer a menor costo y jugar para el futuro?

Seattle tuvo que contratar a un gerente general, y algunas personas interesadas dijeron que los altos mandos de Seattle no estaban a favor de una reconstrucción. Ningún equipo ha pasado más tiempo sin llegar a los playoffs (desde 2001) que los Marineros. Así que el deseo era ir por ello.

Por lo tanto, Jerry Dipoto no habría sido nombrado gerente general si sus planes fueran negociar a los jugadores establecidos.

En cualquier caso, sus amigos dicen que Dipoto examinó la situación y determinó, por ejemplo, que podría obtener un buen retorno por Hernández y Seager, pero podría tener problemas para hacer lo mismo con Cruz y definitivamente con Canó.

Seattle tendría que comerse una parte sustancial de los ocho años por $192 millones pendientes en el pacto y/o tomar un mal contrato de regreso, y eso no era atractivo.

Y todo lo que hay que hacer es seguir las migas de pan a principios de este receso de temporada para ver lo que está haciendo Seattle.

Ningún equipo ha sido más activo. Dipoto ha realizado cuatro operaciones (por Nate Karns, Joaquín Benoit, Leonys Martín y Luis Sardiña) una retención de agente libre (Franklin Gutiérrez) y un agente libre firmado (Chris Iannetta). Dipoto ha utilizado prospectos y dinero para poner jugadores complementarios alrededor del núcleo.

Usted no hace eso si usted está planeando cambiar el núcleo, ciertamente no para hacer peor el equipo de 2016 negociando a Canó a los Yankees por Jacoby Ellsbury.

Como Canó y Ellsbury tienen contratos similares para los próximos cinco años, la única razón por la que Seattle haría tal movimiento sería para salir de los últimos tres años del contrato, y Dipoto fue contratado para ganar ahora, no para solucionar la nómina salarial 2021-23.

Y esto ni siquiera incluye que los Yankees no quieren a Canó, de 33 años, de vuelta por la misma razón por la que no lo volvieron a firmar – tenían miedo de que envejeciera pobremente y costosamente.

EL DATO

Robinson Canó

Bateó .238 con apenas un OPS de .621, cuatro jonrones y 24 carreras impulsadas en los tres primeros meses de la temporada (74 partidos).